Morí y volví a revivir hoy. Nunca nunca nunca se debe combinar el alcohol con los antidepresivos.
Ayer, ¿o antier? hubo una fiesta en mi casa. Muy bonito todo: quesadillas, botanas, alcohol, juegos, música y todo eso que hace de las fiestas todo un deleite.
Todo estuvo genial de no haber sido porque nadie me dijo nunca que los antidepresivos no se llevan con el alcohol; Y menos cuando por no haber tomado la pastilla el día anterior decides ese día tomar DOBLE DOSIS no te matará, como si de XL3 se tratara o cualquier otro antigripal o como si fueran vitaminas; Y menos aún cuando tomas Malibú que no se siente hasta que de plano ya te emborrachaste; Y menos aún cuando sabes que vives solo y que si te hubieras petateado ahí ni cuenta se hubieran dado porque para esa hora ya todos se hubiera ido de la casa; Y menos cuando sabes que esa misma tarde llegará tu padre y la casa es un cochinero
post fiestum.
Fue algo horrible. Me dormí cuando la fiesta acabó. Es más ni siquiera había tomado mucho. Y cuando desperté tenía muchísimo frío y mi cuerpo tenía espasmos involuntarios. Todo el cuerpo temblando in ninguna razón como si tuviera Parkinson. Me dio tanto miedo porque creí que quedaría así de por vida o que me convulsionaría de un momento a otro.
Y lo más feo de eso es intentar hacer el aseo temblando y con una cruda horrible. No lo vuelvo a hacer. Hay cosas que no se deben de mezclar nunca jamás y los depresivos con el alcohol son definitivamentes unas de ellas.
UPDATE: A partir de eso dejé los antiepresivos que aparte no me causaban ningún beneficio. Dirán que lo más correcto era dejar el alcohol. Pero tal vez entedieran si mañana van a su farmacia más cercana y se compran unos antidepresivos, los cuales se toman incluso sin necesitarlos. Como lo que hizo el Doc conmigo sólo pa' sacar lana el desgraciado. Hijo de la chingada.